Con el cambio de estación se retoma la rutina, los trabajos y los horarios se estabilizan. Pero con esta nueva temporada otoñal también hay alteraciones que afectan a nuestras queridas mascotas. En el caso de los gatos, no hay que preocuparse si vemos ciertos comportamientos diferentes, pero sí ser conscientes de lo que les pasa a nuestros compañeros felinos.
Cambios en otoño: no solo el pelo
Los gatos y los perros comienzan la muda de pelo en los meses de otoño. Este es un cambio que sucede cada año y al que los dueños más experimentados están acostumbrados. Algunos consejos para estos momentos que te servirán para no volverte loco y que tu compañero gatuno no sufra con la muda son:
Cepillado regular ahora más que nunca
Cepillar el pelo de nuestros gatos es una costumbre que hace que su pelaje luzca más saludable y brillante. Durante el otoño, la muda afectará a tu mascota y hará que comience a perder pelo de forma rápida y en abundancia. Es decir, durante estos meses que están por llegar, tu gato te llenará la casa de pelaje. Pero no hay de qué preocuparse.
Para hacer este proceso más llevadero, lo que debemos hacer es cepillar a nuestro felino con más frecuencia. Lo ideal para mantener controlada la muda en los gatos es cepillarlos dos veces por semana.
Si notamos que la pérdida es mayor que en otras ocasiones o nos parece demasiado abundante, debemos consultar con un profesional. En este caso, se aconsejará reforzar la dieta del felino con ácidos grasos omega 3 para fortalecerlo. El salmón es una opción muy recomendable en este caso.
El estado de ánimo y tu mascota
El otoño no solo afecta al estado del pelo de nuestra mascota, también a su estado de ánimo. Los gatos, al igual que nosotros, notan los cambios de luz. La progresiva disminución de claridad que se produce en otoño puede hacer que se sientan más apáticos y apagados.
Para poder sobrellevar esta situación y que no lo pase tan mal, debemos de hacer una adaptación progresiva y atender sus necesidades más que nunca. Para ayudarle a adaptarse al nuevo horario, te recomendamos ponerle la comida a ciertas horas, de esa manera se adaptará al cambio de luz más rápidamente. Asimismo, asegúrate de que mantenga una dieta sana, equilibrada y que haga ejercicio. Si lo sacas a pasear, aprovecha para alargar un poco más sus caminatas; si no, puedes dedicar más tiempo para jugar con él en casa.
Cuidado con el frío
El otoño trae temperaturas más bajas y mayor humedad. Así que hay que estar muy pendiente de que nuestras mascotas no pasen frío. De esa forma, evitaremos resfriados y, con ellos, problemas respiratorios derivados. Aunque los gatos suelen ser animales caseros, si tu pequeño amigo duerme fuera es aconsejable acondicionar muy bien la zona para que esté más calentito o que duerma dentro de casa.
Además, si tu mascota tiene artrosis o algún problema relacionado con los huesos, estos se pueden acentuar mucho durante el otoño debido a que las articulaciones se inflamarán más fácilmente.
El otoño nos afecta a todos y, nos guste más o menos, hay que estar más pendientes de nuestros pequeños compañeros de vida. A los gatos también les afecta el cambio de estación. Además de cepillarlos con frecuencia y protegerlos del frío, podemos darles algún premio de vez en cuando y muchos cariños para que pasen esta estación de la mejor manera posible.
