Seguramente muchos de vosotros habéis oído que febrero es el mes de los gatos. Y este dicho tiene su razón de ser. Las gatas a diferencia de otros mamíferos, tienen el celo en una época determinada del año…
Seguramente muchos de vosotros habéis oído que febrero es el mes de los gatos. Y este dicho tiene su razón de ser. Las gatas a diferencia de otros mamíferos, tienen el celo en una época determinada del año, y esta época comienza cuando los días empiezan a alargarse. Su ciclo reproductivo está ligado a las horas de luz. Son poliéstricas estacionales, lo que significa que desde febrero hasta junio-julio tendrán varios celos, que durarán unos 7-10 días y se irán repitiendo cada dos tres semanas.
Las gatas en celo no sangran como las perras, así que hay que fijarse en otros signos, como los maullidos intensos para llamar al macho, se ponen más mimosas y pueden llegar incluso a marcar el territorio con orina.
Generalmente la pubertad la alcanzan a partir de los cinco meses, pero como el ciclo estral depende tanto de la luz y del peso de la gata, puede oscilar entre los cinco y los ocho meses de media.
Los gatos machos a partir de los cinco meses también, y ante la presencia de gatas en celo, pueden llegar a manifestar signos tales como anorexia, vocalizaciones molestas y marcaje territorial.
Todos estos signos de estro tanto en gatas como en gatos pueden llegar a ser muy molestos, tanto para los dueños (marcaje y maullidos) como para los vecinos, pues los maullidos pueden llegar a ser muy impertinentes y molestos.
Son estas razones las que empujan a muchos de los dueños de gatos a esterilizar a sus mascotas.
Como veterinarios recomendamos la esterilización quirúrgica en gatos pues aunque en el mercado existen fármacos para inhibir el celo en gatas, su uso se relaciona con un aumento en la incidencia de tumores mamarios malignos e infecciones uterinas, lo que deriva en enfermedad crónica y cirugías complicadas, aumentando el riesgo y la probabilidad de complicaciones, tanto antes como después de la cirugía.
Una de las razones que a veces hace dudar a los dueños de gatos a la hora de esterilizarlos es el hecho de que puedan engordar, pero a día de hoy existen en el mercado alimentos específicos para gatos esterilizados que proporcionan todos los nutrientes necesarios para un buen desarrollo pero con energía contenida para evitar el sobrepeso.