Las infecciones de orina son uno de los problemas de salud más comunes que afectan a muchos animales, incluidos los seres humanos, y que en los perros se agudizan un poco más. Sobre todo, es muy común que las hembras sufran este tipo de infección.
En la mayoría de los casos, la infección urinaria se produce a través de bacterias que provienen del exterior, y pueden llegar a afectar la vejiga e, incluso, dañar los riñones. En este sentido, una alimentación bien cuidada puede prevenir que nuestras mascotas sufran infección de orina. Pero no solo eso, sino que con una dieta equilibrada y bebiendo mucha agua, tu mascota tendrá bastantes garantías de no sufrir una infección urinaria.
¿Cómo sabes que tu perro tiene infección de orina?
Entender que le ocurre a un amigo o a un familiar es muy sencillo, pues las personas hablamos. Los perros no tienen esa suerte, por lo que, cuando vemos que actúan de una manera diferente a la habitual, lo común es asustarnos. ¿A ti te pasa eso con tu mascota?
Para que no tengas ninguna duda en el caso de las infecciones urinarias, tendrás que notar que de repente tu perro se queja sin motivo aparente. Además, un perro que tiene infección urinaria tendrá ganas de hacer pis frecuentemente de la misma manera que se mostrará sediento o con ganas de beber más agua que de costumbre.
La infección urinaria produce dolor y molestias en el momento de orinar, por lo que si tu mascota gime o escurre un poquito de orina al caminar, es que está sufriendo una infección importante.
Otro de los síntomas es el color amarillento, casi naranja, de la orina, así como su fuerte olor. Si has podido notar alguno de estos síntomas en tu mascota, no dudes en acudir a tu veterinario. Los profesionales le harán los estudios necesarios y le pondrán el tratamiento adecuado para que la infección desaparezca.
¿Cómo tratar la infección urinaria en tu perro?
Es muy importante que si tu mascota presenta alguno de los síntomas que hemos explicado en líneas anteriores, acudas directamente al veterinario para que puedan hacerle las pruebas oportunas. Si se deja al animal sin tratamiento, la infección puede agravarse y propagarse desde la uretra a otras áreas, como la vejiga o los riñones poniendo en peligro la salud de tu mascota.
Una vez que has acudido al veterinario para que los profesionales estudien la infección, te recomendarán diferentes tratamientos. Dependiendo de la gravedad del problema, tu perro tendrá que tomar antibióticos, medicamentos, hacer cambios en la dieta, o, en cambio, tendrás que acudir a la cirugía para eliminar cálculos en la vejiga o tumores, o para corregir anomalías congénitas.
Son muchas las variantes que tiene el tratamiento de las infecciones urinarias, y por ello, es muy conveniente acudir al veterinario cuanto antes, para que el problema no se expanda mucho.