La filariosis es una enfermedad parasitaria causada por un gusano llamado dirofilaria immitis que se instala en el corazón y vasos pulmonares de los perros causando problemas…
La filariosis es una enfermedad parasitaria causada por un gusano llamado dirofilaria immitis que se instala en el corazón y vasos pulmonares de los perros causando problemas que pueden ser de marcada gravedad. Afecta tanto a perros como a gatos, aunque en gatos es más complicado de ver, puesto que los hábitos de vida de los mismos hacen que sea más difícil que contraigan esta enfermedad
¿Cómo se transmite y cuáles son sus síntomas?
La filariosis se transmite por la picadura de algunos mosquitos que, al picar, inoculan las formas inmaduras o microfilarias de un perro infectado a un perro sano.
Estas formas juveniles se ponen en circulación por los vasos sanguíneos del perro y maduran a la forma adulta del conocido como “gusano del corazón”. Su ubicación final es, como dice su nombre, el interior de la cámara derecha del corazón y los vasos pulmonares del perro; incluso, en algunas ocasiones, puede afectar el hígado, bazo, riñón u otros órganos.
Aunque en un principio pueden pasar desapercibidas, las formas adultas de este gusano pueden llegar a medir hasta 30 cm de largo, por lo que su presencia en estos órganos vitales de los perros ocasiona daños importantes que suelen evolucionar de forma grave si no se toman medidas, pudiendo causar incluso la muerte del animal.
Los síntomas que podemos ver en un perro afectado por filariosis varían desde tos, dificultad respiratoria y cansancio, hasta pérdida de peso y sangrado por la nariz, entre otros.
Es importante estar atentos para poder identificarla: acude al veterinario para que realice un análisis de sangre que detecte la presencia de microfilarias circulantes, de esta manera tu mascota podrá ser tratada a tiempo.
¿Dónde y cuándo debo estar alerta?
La filariosis es una enfermedad endémica en muchos países del sur y este de Europa.
Las temperaturas suaves y la humedad de nuestra geografía hacen de nuestro país un sitio ideal para que vivan los mosquitos transmisores de la enfermedad y, con ellos, el parásito.
Si bien la prevalencia de la enfermedad varía entre regiones, el aumento de los viajes con nuestras mascotas y el cambio climático hacen que su distribución sea cada vez más alta.
En este mapa podemos ver la distribución de la filariosis en España y Portugal
La época de más riesgo de contagio de la filariosis coincide con la mayor actividad de los mosquitos que la transmiten, que generalmente abarca desde abril hasta octubre; aunque si los inviernos se suavizan como consecuencia del cambio climático y el aumento de la temperatura media en los meses tradicionalmente más fríos, puede que esta franja de tiempo sea mayor, por lo es ideal estar alerta todo el año.
¿Se puede evitar la enfermedad?
Actualmente existen varios productos idóneos para la prevención de la filariosis. Disponemos de dos tipos de fármacos, unos dirigidos a evitar que el mosquito muerda a nuestra mascota, otros dirigidos a eliminar las formas inmaduras (microfilarias) que puedan haber entrado en el torrente sanguíneo del perro, evitando su desarrollo y llegada al corazón. Si viajas con tu perro a zonas de riesgo, llámanos para que podamos ayudarte a evitar que tu mascota contraiga esta enfermedad