Los gatos, más que adaptarse a un hogar, son los que esperan que todo lo que les rodea se adapte a ellos. Por eso, si tienes gato habrás notado que la esquina de algún mueble está arañada, o que ya no puedes sentarte en tu sofá. ¿Es verdad? El gato siempre intentará salirse con la suya, y lo que opine su dueño le va a dar igual.
Ha llegado el momento de darle la vuelta a la tortilla. ¿Por qué no es el dueño el que se hace cargo de la situación? Es verdad que si tienes un gato, debes tener una casa adaptada a él o, al menos, un espacio reservado para tu gato.
Los gatos no dejan de ser animales depredadores, por lo que, les encanta escalar, arañar y atrapar insectos. Y estas actividades las puede tener que hacer en tu casa.
6 consejos para hacer feliz a tu gato
Por ello, ha llegado el momento de adaptar las costumbres de tu gato y hacerle mucho más feliz, sin que te estropee los muebles o te robe el sitio en el sofá.
¿Preparado para leerlas? Es aconsejable que te empapes de recomendaciones y vayas probando con tu gato. Si la actitud no es buena, siempre puedes acudir a tu veterinario para que te aconsejen mejor.
Cómprale un rascador para mantener las garras en forma
Si estás pensando en crear un entorno hogareño y acomodado a las necesidades de tu gato, un rascador no puede faltar. Como buen depredador, el gato necesita afilar sus uñas, por lo que es importante que el rascador sea cómodo para él.
Es posible que no se acierte a la primera con este objeto, pero tenemos una táctica buenísima: fíjate en los objetos que araña para afilarse las uñas, y compra un rascador que se parezca y se adapte a esas características.
Fomenta su instinto depredador
A los gatos les encanta jugar, sobre todo, de cachorros. Por eso, es importante que compres un montón de juguetes adaptados a sus necesidades.
Ten en cuenta que los gatos son muy exigentes, por lo que fíjate si tu minino juega en casa con objetos que ruedan, que hacen ruido o, si en cambio, juega con telas, cartón o distintos materiales. Cuando tengas el estudio hecho, ve a por un juguete que cumpla con todas las características y que le valga para fomentar su instinto depredador.
Ten en cuenta que el juguete le tiene que gustar al gato, no al dueño.
Coloca el arenero en el lugar correcto
Uno de los accesorios que no puede faltar en una casa con gato es el arenero. Este no puede estar colocado en cualquier parte: la bandeja debe estar colocada lejos de la comida y la bebida del gato, y en un lugar íntimo, para que el gato no se sienta observado cuando esté haciendo sus necesidades.
Además, la arena que se utiliza para la bandeja es específica, porque debe tener propiedades absorbentes tanto para el olor como para la humedad. Y, por supuesto, limpia muy a menudo la bandeja.
Compra una cama de gato cómoda y ponla en un lugar tranquilo
A los gatos les gusta dormir un montón, y necesitan hacerlo en un lugar cómodo para ellos, donde nadie les moleste ni les ve. Por eso, elige una buena cama, comprueba que a tu gato le gusta y colócala en un lugar donde no le vayas a molestar.
Si la cama es cerrada o estilo iglú, le proporcionará protección al gato y se sentirá más cómodo.
Regálale un cepillo para el pelo
A los gatos les encanta peinarse, por eso se acicalan a menudo. El problema de esto es que la mayoría del pelo va a su estómago.
Por tanto, compra un cepillo de pelo para ayudarle a estar guapísimo. Además de hacerle muy feliz, conseguirás evitar que ingiera tanto pelo. A los gatos les encanta el masaje con el cepillo, así que lo mantendrás súper contento y tranquilo.
En este sentido, para que tu gato no cree bolas de pelo en su estómago al haberse acicalado, es importante que compres malta, un compuesto vegetal derivado de la cebada. Con esto conseguirás facilitar la expulsión del cúmulo de pelo en el estómago del animal.
Acude al veterinario para hablar de la alimentación adecuada para tu gato
Una dieta adecuada favorecerá la salud de tu gato, por lo que es importante que cuides el tema de la alimentación. Dependiendo de la edad, el tamaño y el estilo del animal, tendrás que darle un alimento u otro.
Un veterinario es el que más sabe de estos asuntos, así que es importante que acudas a él para hablar del tema. Aprovecha, si quieres, una revisión cercana que tengas, y pregúntale sobre la alimentación para tu gato.